La llegada del verano y de las altas temperaturas hace que nuestra alimentación varíe para adaptarse a estos cambios de la mejor forma posible. ¿Cuáles son los mejores alimentos que podemos tomar en verano? Aquellos que nos hacen sentirnos más ligeros y, además, nos mantienen hidratados.
Entre los alimentos idóneos para los meses de altas temperaturas destacan:
- Frutas. Las frutas son los alimentos ideales para estar hidratados y recibir vitaminas de forma directa. Existen decenas de tipos y en verano podemos disfrutar de algunas que te darán mucho juego, ya sea para comerla directamente o para ensaladas, helados, etc. Las frutas que mejor te harán sentir en verano son:
- Sandía. Ideal, fresca y con mucha agua. Te mantendrá hidratado y además su sabor dulce hará que tengas el paladar satisfecho.
- Melón. El melón también es una fruta muy veraniega que te aportará muchos beneficios a tu organismo.
- De las frutas más completas para cualquier momento. Antes o después de entrenar, en el desayuno, en las ensaladas, en la cena, como merienda…
- Estas pequeñas frutas te aportan mucha vitamina y puedes usarlas en todas las comidas.
- Toda la fruta de temporada. El verano es un momento ideal para aprovechar y comer la fruta de temporada, tanto la que hemos mencionado como las otras que surgen en esta época.
- Verduras. Lo mejor de las verduras, aparte de su bajo contenido de calorías, es que en su composición el agua es su sino. Las verduras te harán estar más sano, despejado y aportan a tu cuerpo agua, vitaminas y antioxidantes. ¿Cuáles tomar? Lechuga, zanahoria, tomates, pepinos, calabacines, pimiento, cebollas, brócoli… Échale imaginación y agrega más verdura a tu alimentación.
- Ensaladas. Es uno de las comidas por excelencia del buen tiempo. Las ensaladas no tienen porqué ser aburridas, con la cantidad de alimentos hipersanos con los que disponemos podrás hacer ensaladas para cada día.
- Pescados. Asados, al horno, a la plancha… Sardinas, atún, boquerones… El Omega3 de los pescados es esencial para nuestra dieta, y en verano no podía ser menos ¿A quién no le apetece unas sardinas en el chiringuito?
- Carnes bajas en grasas. La ingesta de carnes en verano puede resultar pesada, pero si optas por carnes menos grasas como el pollo, conejo o cordero tus platos (y organismo) te lo agradecerán.
- Legumbres (en ensaladas). ¿Quién ha dicho que en verano no se pueden tomar legumbres? Olvídate de guisos y hazlos en ensalada. Te sorprenderán y seguirán aportando nutrientes como la fibra esenciales para tu dieta.
- Agua (y derivados sanos). Quizás es el súper alimento en cualquier estación del año. Somos agua y por ello, nuestro organismo debe estar siempre hidratado. Agua fría, con limón, en infusiones… Hidrátate para disfrutar más el verano.