La provincia de Córdoba disfruta de una magnífica gastronomía en la que la cocina mediterránea se mezcla con la tradición árabe en determinados platos típicos de Córdoba. Platos frescos para aliviar el intenso calor de los meses estivales, platos contundentes y ricos en calorías para el frío de la sierra o dulces tan ricos que te hacen olvidar cualquier pena. La gastronomía cordobesa es un claro ejemplo de cocina mediterránea para todos los paladares.
Platos cordobeses
Salmorejo El salmorejo es, sin duda, el plato por excelencia de Córdoba. No se hace un salmorejo como el cordobés. Hecho a base de tomate, pan y aceite de oliva, el salmorejo es una crema (que no sopa) fría y cremosa que deleitará tu paladar en los calurosos días de verano. Es un plato tan cordobés que hasta existe una cofradía gastronómica que vela por su conservación y difusión.
Flamenquín Quien no ha comido un Flamenquín de jamón en Córdoba no sabe realmente qué plato se está perdiendo. El flamenquín de jamón es uno de los platos imprescindibles de la gastronomía cordobesa. Su preparación es sencilla y suele ir acompañado de mayonesa casera y patatas fritas. ¿Qué lleva? El flamenquín lleva filetes de lomo de cerdo cortados finos, jamón serrano y queso (quien quiera). Estos tres productos se enrollan y se pasa por harina, huevo batido y pan rallado para posteriormente freírlo en aceite de oliva. Un manjar sencillo que tu paladar reconocerá entre todos los menús disponibles.
Rabo de toro El tradicional rabo de toro cordobés es otra de las exquisiteces de la gastronomía de Córdoba. Ya sea en tapa o en plato, el rabo de toro es uno de los platos que más solera tiene y que mejor describen la mesa cordobesa. Con una elaboración delicada se sirve tras un reposo mínimo de media hora. Se prepara con cebolla, rabo de toro, tomates, pimientos verdes, zanahoria y ajo; todo rehogado con el magnífico vino blanco Montilla-Moriles (también cordobés).
Boquerones en vinagre Los boquerones en vinagre es otra de las tapas típicas cordobesas. La preparación de los boquerones en vinagre suele ser mayor a un día, ya que los boquerones se deben dejar en vinagre para que tomen su sabor. Imprescindible usar un buen aceite de oliva y un buen vinagre de vino.
Cordero a la miel Los platos más calóricos son imprescindibles en la gastronomía cordobesa para los días de frío en su sierra. El cordero a la miel se convierte en uno de los preferidos en la época invernal por su preparación y contundente sabor. Se trata de una receta antiquísima de origen musulmán en la que se combinan los sabores salados (del cordero) con los dulces (miel) creando un contraste lleno de matices.
Pastel cordobés Este postre es una herencia musulmana que ha sobrevivido a años de cocina. Consiste en una masa de hojaldre de cidra confitada, conocida como cabello de ángel, con una cubierta de almendras tostadas y polvo de azúcar y canela. Un manjar exquisito para los paladares más dulces.
Habas en cazuela Este guiso es típico para disfrutar de los productos de la huerta: habas, alcachofas aderezados con jamón serrano e hierbabuena. Una realización sencilla pero con delicadeza para que las habas no pierdan su sabor mezclado con otros sabores más fuertes como el jamón.
Pinpoperrete Parecido al salmorejo, en el pimporrete no se utiliza aceite. Es como una especia de pasta realizada con migas de pan, ajos, tomates muy maduros, vinagre y sal. Se sirve muy muy fría, a ser posible acompañada por huevos duros. Estos son algunos de los platos tradicionales de Córdoba, pero en las cartas de los bares y restaurantes podrás encontrar decenas más que saborear con deleite.