La receta clásica del salmorejo cordobés es a la par simple y contundente. Con ello estamos dejando patente que tiene la suficiente entidad como para no precisar el apoyo de ningún sabor o alimento extra y novedoso con que mejorarlo.
Sin embargo, a pesar de su autosuficiencia, no deja de ser generoso a la hora de admitir marchar de la mano de muchos y diferentes sabores y texturas consiguiendo combinaciones tremendamente originales y recomendables para disfrute del paladar.
Hoy desde Restaurante Casa Antonio queremos acercarte a tres «buenas amistades» del salmorejo cordobés que estamos seguros te van a sorprender tanto como a gustar.
Grandes aliados del salmorejo cordobés: combinaciones que no defraudarán.
La base de esta receta no deja lugar a dudas. El tomate, pan, ajo, AOVE, y sal consiguiendo una textura consistente y suave a la vez son la clave de este afamado plato.
Pero, ¿Quién puede atreverse a acompañarlo sin romper su equilibrio y sabor?. Veamos:
1.- Anchoas: El sabor intenso de las anchoas se conjuga con la suavidad del tomate maduro con que se debe elaborar un buen salmorejo. Sin embargo, dada la concentración de sal de estas, no debemos abusar de su presencia en el plato sino esparcir algunos trozos de forma testimonial que podemos incluso acompañar con algunos pequeños taquitos de queso de algún tipo suave.
2.- Manzana y aguacate: en esta ocasión las frutas se conjugan como las grandes aliadas de esta receta tradicional donde se deben trocear en pequeños cubitos ambas frutas. Aderezarlas con un buen chorrito de AVOE sobre el plato será el toque final que culminará con éxito esta buena combinación.
3.- Gambas y mango: introducir el sabor del marisco es igualmente una genial idea. Quien dice gambas dice langostinos o incluso cigalas, eso sí, mejor cocidas que a la plancha o braseadas. El detalle del mango aporta el detalle innovador, suave y dulzón que contrarrestaría y complementaría al del marisco.
En Restaurante Casa Antonio nos caracterizamos por conservar las recetas tradicionales de nuestra tierra tales como la del salmorejo cordobés. Sin embargo también nos defina la valentía y la iniciativa de jugar con mezclas novedosas que impriman de vez en cuando nuevos aires a los platos de siempre.
