Acompañar a los alimentos con un buen vino es sin duda un auténtico lujo para el paladar que, afortunadamente, puede estar al alcance de todos por la gran variedad de tipos y precios siempre dentro de un índice de calidad óptimo.
En multitud de ocasiones nos vamos a ver en la tesitura de elegir entre una clase de vino u otra, muchas veces condicionados por el alimento al que vaya a acompañar. Pero por encima de todas las costumbres y premisas al respecto está el gusto personal del consumidor. De ahí que nuestra primera recomendación sea: «decídase por el que más le guste, lejos de seguir cánones impuestos o muy extendidos»
En Casa Antonio sabemos bien de lo que hablamos cuando nos adentramos en el fabuloso mundo del vino, sus variedades, denominaciones de origen, etc….
Es por eso que no pretendemos nada más que dar a conocer algo mejor las propiedades y las combinaciones más óptimas del vino fino y del vino tinto, sabiendo que, ofreciendo como en Casa Antonio hacemos la mejor calidad en cada uno de ellos, el éxito estará asegurado.
Un tinto en la mesa:
Esta variedad de vino tan nacional como internacional, es portador de numerosas bondades amén de su exquisito sabor.
- Combina generalmente con carnes del tipo de cordero o ternera.
- Es un magnífico acompañamiento en embutidos de gran calidad e incluso de algunos tipos de queso.
- Sus beneficiosas propiedades en el plano cardíaco son motivo de numerosos estudios, la mayoría de los cuales destacan su capacidad para evitar la formación de coágulos, pues al ser rico en vitamina E produce un efecto de limpieza sanguínea.
- Incluso algunos van más allá ampliando sus capacidades hasta las afecciones de tipo urinario, pues estiman que es capaz de erradicar bacterias de diversa índole que afectan a riñones y vejiga.
- Ayuda a impedir la formación de grasa e incluso incide en la eliminación de la ya existente, de ahí que en algunas de las más famosas dietas de adelgazamiento se encuentre entre las bebidas permitidas.
En general, ayuda siempre a potenciar el sabor de los alimentos y por la liberación de endorfinas que provoca, colabora en la relajación y por tanto el disfrute de una buena cena o almuerzo rodeados de familia o amigos.
Al calor de un buen fino:
No menos importante y delicioso es el vino fino. Precisamente en Casa Antonio hemos apostado de forma activa con el vino procedente de la denominación de origen Montilla-Moriles, por su calidad, su sabor y su capacidad para acompañar alimentos de la tierra.
- Generalmente el vino fino se sirve junto a carnes blancas, como el pollo, y con el pescado y el marisco.
- Es ideal para aperitivos y tapas.
- Son igualmente grandes compañeros de guisos tradicionales a base de legumbres.
- Entre sus propiedades beneficiosas destaca la participación en la producción del llamado «colesterol bueno» en nuestro sistema sanguíneo.
- Sus propiedades antioxidantes son altamente beneficiosas para un gran número de patologías, ayudando a prevenir enfermedades.
- Ayuda a combatir estres, ansiedad e incluso depresión.
Sea cual sea, fino o tinto, al final debe ser elección personal de quien lo vaya a disfrutar, pero algo que debe ser común en ambos es beber con moderación y elegir siempre una buena calidad.