De tradición romana y posteriormente árabe procede la disposición de muchas casas de la ciudad de Córdoba en torno a patios centrales que, engalanados de miles de plantas y coloridas flores exquisitamente cuidadas, terminaron generando esta preciosa festividad que hoy conocemos como los «Patios de Córdoba».
Los propietarios de estas casas, algunas de las cuales integran incluso varias viviendas, miman durante todo el año sus macetas para que llegado el mes de mayo, luzcan en su máximo esplendor y sirvan de reclamo a cuantos quieran disfrutar de un mágico espectáculo para los sentidos.
Declarados como «Patrimonio de la Humanidad«, cada temporada se multiplica el número de visitantes venidos de todas partes del mundo junto a los propios del lugar, que recorren un itinerario debidamente establecido para que no dejemos de admirar ninguno de los que están abiertos al público, entren o no en competición por alzarse con el reconocimiento de mejor patio de su categoría cada año.
Pero Córdoba nunca puede prescindir de su gastronomía para terminar de engrandecer cada una de sus más típicas celebraciones.
En el Restaurante Casa Antonio, se esmeran cada año en ofrecer una amplia y selecta carta de platos elaborados con los mejores productos para que el «Mayo cordobés» se pueda igualmente saborear, comprometiendo así a los cinco sentidos a pleno rendimiento en una ocasión como esta.
Una cocina tradicional basada en las recetas más típicas de la ciudad y propias en fechas tan primaverales, convierten a Casa Antonio en uno de los más afamados referentes gastronómicos durante todo el año pero especialmente en estas fechas de largos y prolongados recorridos a pie para disfrutar de la ciudad.
Después de visitar los distintos barrios más emblemáticos de Córdoba para admirar el colorido de sus flores, el silencio de sus patios roto tan sólo por el sonido de las fuentes que presiden algunos de ellos, y el olor a primavera que inunda la ciudad, llega la hora de sentarse a disfrutar de la mejor temperatura frente a un buen plato de la más exquisita cocina cordobesa y un buen vino Montilla-Moriles de la tierra, algo de lo que son grandes especialistas en Casa Antonio.